Bienvenido Abril!

¿Qué tal llevas nuestro reto? Tanto si es tu cuarto mes con nosotros, como si te incorporas ahora, te animamos a que, este mes, des lo mejor de ti mismo y trabajes por el objetivo que te proponemos porque, de verdad, puede marcar la diferencia.

Y recuerda que, durante 12 meses, el equipo de psicólogos de Álava Reyes Madrid se compromete a acompañarte y ayudarte a descubrir que puedes ser feliz y aprender a quererte a ti mismo…¿te atreves a conseguirlo?, ¿quieres saber cómo?

Este mes: Abril. Descárgate nuestro calendario y tenlo siempre a manos. Te servirá para recordar lo importante que es, para ti, recuperar tu vida.

La sociedad nos impone ser fuertes, ser valientes, ser duros y no pedir ayuda cuando la necesitamos, como si la sensibilidad fuera una desventaja, o sinónimo de debilidad…y ésa es una idea terriblemente injusta. No podemos evitar reaccionar emocionalmente ante los acontecimientos. Las emociones son evolutivas, enormemente necesarias y, como tales, tenemos derecho a experimentarlas. Lo que sí podemos hacer es elegir los pensamientos y las palabras que nos decimos a nosotros mismos en esas situaciones difíciles. Distinguir entre la reacción natural y automática  (ira, tristeza, miedo o alegría entre otras), y la acción es fundamental. No podemos controlar la reacción, ni debemos intentar hacerlo. Pero sí que podemos controlar qué hacemos a continuación, cómo actuamos y, sobre todo, qué pensamos.

Cuando nos decimos cosas como: “esto no tiene solución”, “no valgo nada” o “siempre lo hago todo mal”, nuestro cerebro se lo cree y actúa como si fuera verdad. ¿Qué podemos hacer para cambiar ese discurso interno?: Dar un paso atrás y tomar distancia para observar la realidad completa. Podemos pensar, por ejemplo, “¿qué pruebas tengo de que no valgo nada?”, sustituir palabras como “siempre” y “nunca” por “en esta ocasión”, o evitar los catastrofismos ya que, rara vez, las cosas son 100% perfectas o un fracaso. Esta capacidad se entrena, cuanto más la practiquemos, más fácil y mejor nos saldrá.