Infidelidades
Tras una infidelidad, ¿Debemos contarla u ocultarla?
A veces una infidelidad puede surgir puntualmente sin buscarla; habiendo detrás un gran e indudable arrepentimiento. ¿Debemos confesarlo? Es delicado pues hay personas que, aunque lo intentan, luego no pueden recuperar la confianza ni puede superarlo, y surge el fantasma de la duda y se torturan; con lo que quizás podemos plantearnos si es conveniente o no, y volcarnos de nuevo en recuperar el amor y la confianza, sabiendo fue algo accidental.
Antes de decidir si lo contamos o no, debemos evaluar los motivos y las repercusiones; y así decidir.
Dependerá de:
- La intencionalidad: una cosa es un tema fortuito y otra algo buscado intencionalmente
- Frecuencia: Si es la primera y única o si es reiterado
- Por qué lo cuento: para desahogarme
¿Debo perdonar una infidelidad?
La mayoría dicen que no la perdonarían, pero si hay sentimientos y años de relación…todo puede cambiar.
Lo importante es decidir conscientemente, sin impulso ni presión
Algunos aspectos que puedes considerar a la hora de decidir si estás en disposición de perdonar una infidelidad son:
- El grado de la infidelidad
- Frecuencia de la infidelidad
- Las causas que motivaron la infidelidad (casual o buscada)
- El tipo de infidelidad: (emocional de lo sexual)
- El daño que la traición ha causado
- La posibilidad de recuperar la confianza
- Tus sentimientos hacia la otra persona
A veces perdonar conscientemente una infidelidad no es garantía de que se logre recuperar la relación porque, muchas personas, simplemente no logran olvidar lo sucedido y su herida se abre una y otra vez.
Aprender a olvidar es crucial para superar una infidelidad y lograr que la relación salga fortalecida, pero es muy complicado y trabajoso. Incluso, si piensas que no serás capaz de comenzar desde cero, la mejor solución suele ser la ruptura; de lo contrario el daño será mayor pues el resentimiento, rencor y celos pueden convertirse en armas de doble filo.