Felicidad por Christine Lebriez
Ya estamos saliendo de ésta… Aprovecha para plantearte una nueva actitud ante la vida, no la desperdicies: todo consiste en ¡EL ARTE DE NO AMARGARSE LA VIDA!
El mundo está ahí fuera; es el mismo para unos y para otros, pero la gran diferencia está en cómo se mira. En estos días es especialmente importante saber mirar el mundo con una actitud adecuada. ¿Quieres saber cómo?
Construye tu felicidad
¿Quieres realmente ser feliz?
Tú puedes ser feliz. Pero no se trata de “TROPEZAR CON LA FELICIDAD”. Esto no tiene que ver con el azar, ni con la casualidad, ni con la suerte.
Las “circunstancias externas” no determinan la verdadera felicidad: lo que cuenta es tu actitud ante la vida. Si eres positivo, es probable que seas feliz. Si eres negativo, probablemente serás infeliz.
“La fuente de la felicidad se puede encontrar en cómo te comportas, qué piensas y qué metas te propones”.
Autoestima
La que nos hace sentirnos bien con nosotros mismos: la AUTOESTIMA y la AUTOCONFIANZA para sentirnos seguros de nuestras capacidades.
NO TE PARALICES, LÁNZATE y vete tomando pequeñas decisiones, microobjetivos y situaciones que puedas superar. Solo has de empezar estos días con pequeñas cosas: tareas a las que nunca antes te has atrevido, llamadas que nunca antes has realizado… Encuentra tu espacio y ve avanzando con éxito a pequeños saltitos superables. Se trata de que te propongas metas realistas que puedas alcanzar y desafíos que puedas superar.
Tendrás que hacer un gran trabajo de reestructuración cognitiva para cambiar la manera de pensar que tienes de ti mismo. Recuérdalo: halágate y alábate; sí, aunque te suene extraño: has de ser la primera persona en reconocerte, aceptarte, gustarte y premiarte. ¡Además, repasa tus éxitos y tus habilidades personales.
También vamos a tener que evaluar y trabajar tu ASERTIVIDAD: ¡queremos que te lances con decisión a comunicar tus ideas, tus opiniones y tus valores!
Otro punto interesante es NO caer en la DESEABILIDAD SOCIAL, que es el deseo de intentar caerle bien a todo el mundo. ¡Es imposible satisfacer a todo el mundo y caer bien a todos! ¡Por favor, venga ya…; menudo esfuerzo!
Trabaja eso; recuerda que una PERSONALIDAD SEGURA es mucho más seductora que ninguna otra cosa.
Cómo mejorar tu autoestima
¡QUE PARES YA DE UNA VEZ! ¡PROPÓNTELO YA e INTÉNTALO SIN CESAR!
Sí, eso es: me estoy refiriendo a esos pensamientos que te están amargando y martirizando.
Además, probablemente ni siquiera se corresponden con la realidad; pero son tus pensamientos más tóxicos y dañinos, y, con ellos, no te quieres y no avanzas.
Es fácil ser rehén de pensamientos negativos, especialmente cuando hemos acumulado varios y hemos generado una inercia. No paras de RUMIAR y darles vueltas una y otra vez.
Tener pensamientos negativos o derrotistas es comprensible a veces. Sin embargo, alimentarlos, retenerlos o incluso aumentarlos reduce tu calidad de vida y te envenena. Esos pensamientos son muy peligrosos, pues te quitan energía, te arrebatan fuerza y, lo que es peor, dañan tu autoestima y tu seguridad.
¡ASÍ QUE YA VALE! ¡LIBÉRATE DE TU PRISIÓN Y TU CALVARIO! Vamos, vente conmigo y te enseño cómo:
1.- MIRA, OBSERVA Y SÉ CONSCIENTE DE TUS PENSAMIENTOS: los observas, pero no los juzgas; aquí se trata de que descubras qué piensas. Solo siendo conscientes de nuestros pensamientos negativos podemos tomar medidas para desactivarlos.
2.- REPLANTEA CUALQUIER PENSAMIENTO: cuestiónalo, has de preguntarte una serie de cosas sobre tus propios pensamientos:
a) Certeza y realidad de mis pensamientos: ¿Son ciertos al 100%? ¿En qué pruebas me baso? ¿Se ajustan a la realidad?; ¿puedo probar que es así?
b) En caso de que sean ciertos, ¿cuál es la MAGNITUD DE SUS CONSECUENCIAS?: ¿Qué ocurriría si…?; ¿sería tan terrible…?; ¿a qué áreas de mi vida afectarían?; ¿podría soportarlo?
c) ¿Cuáles son los EFECTOS de pensar de esa manera?: ¿pensar soluciona mi problema?, ¿me hace sentir bien?
Practica esto sin cesar todos los días de tu vida con cada pensamiento incómodo…, y apreciarás el cambio.
3.- RODÉATE DE GENTE POSITIVA Y BUSCA EXPERIENCIAS AGRADABLES: Si lo que ves, lo que escuchas y lo que lees es positivo, si la gente que te rodea es positiva, será fácil alejar el pensamiento negativo.
4.- REPÍTETE AFIRMACIONES POSITIVAS y RECONOCE TUS ÉXITOS Y CUALIDADES: reconócete tu valía, y céntrate en repetir y ver lo positivo que te rodea.
5.- EVITA LOS DISPARADORES DE PENSAMIENTOS NEGATIVOS (TÉCNICA DEL STOP O PARADA DE PENSAMIENTO). Sustitúyelos utilizando una canción, una imagen, una lectura, lo que ves en la televisión, la compañía de ciertas personas…
Practica todo esto sin cesar… Recuerda que nadie es perfecto. Persevera y sigue adelante.